Diseñar el futuro

Nuestra visión del futuro es clara: de aquí a 2050 hemos de trabajar para que Audi sea una empresa con un balance neutro de CO₂ 1. Una tarea llena de retos en la que se han de tener en cuenta todos los tramos del ciclo de vida de un vehículo, no solo durante la producción, sino también todo aquello que sucede incluso antes como, por ejemplo, la cadena de suministro. Por ello hemos nuestro foco en el uso responsable de los recursos, la reducción de las emisiones de CO₂ 1 y el desarrollo de la movilidad eléctrica como forma de impulsar un futuro más sostenible. Nuestro objetivo para 2025 es reducir la huella de CO₂ 1 de la flota Audi un 30 % con respecto al año de referencia 2015 a lo largo de todo el ciclo de vida del producto. Para conseguirlo, hemos apostado por la movilidad eléctrica entre otras medidas, como forma de avanzar hacia una producción con menos emisiones.

Trabajamos para que todos los centros de producción Audi ofrezcan un balance neutral de CO₂¹
2025 es el año que nos hemos marcado para conseguir una mayor sostenibilidad en la red de producción, tal como marca nuestro programa medioambiental Mission:Zero. Para esa fecha, todos los centros de producción Audi deberán presentar un balance neutral de CO₂ 1. Un ejemplo claro de nuestra misión son las fábricas de Bruselas y de la localidad húngara de Györ, que actualmente ya operan con un balance neutral de CO₂ 1. En Audi Hungría hemos desarrollado el poder de la energía geotérmica como un elemento fundamental para obtener energía sin apenas emisiones. En Audi Bruselas se ha optado por el poder de la energía solar y la instalación fotovoltaica ocupa una superficie de unos 107.000 metros cuadrados. Y el suministro de calor de la planta de Bélgica se cubre mediante certificados de biogás. Para compensar otras emisiones que actualmente aún no se pueden evitar mediante fuentes de energía renovables, Audi Bruselas recurre a los llamados proyectos de crédito de carbono.
Mission:Zero en la planta de Ingolstadt
La sede central de Audi en Ingolstadt está en camino de convertirse en un centro de trabajo con un balance neutral de CO₂1: Ya desde principios de 2012, la fábrica de Audi en Ingolstadt funciona exclusivamente con electricidad verde. Para la obtención de energía de fuentes renovables se encargan, entre otros sistemas, módulos fotovoltaicos dispuestos sobre una superficie de unos 23.000 metros cuadrados. Además, las industrias externas de los alrededores, como, por ejemplo, una refinería, suministran a la planta calor residual bajo en emisiones de CO₂1.
Asimismo, en 2019 se puso en marcha en Ingolstadt un nuevo centro de suministro de agua procesada con un biorreactor de membrana, para convertir las aguas residuales de nuevo en agua industrial de alta calidad gracias a las correspondientes etapas de limpieza. De este modo se reduce considerablemente la demanda de agua limpia en la producción. Por otra parte, AUDI AG está comprometida desde 2009 con la Audi Stiftung für Umwelt GmbH, la fundación sin ánimo de lucro de Audi para la protección del medio ambiente.
Iniciativa
Audi es miembro de la Global Battery Aliance, una iniciativa de múltiples empresas cuyo objetivo es definir la sostenibilidad a lo largo de toda la cadena de creación de las baterías. Esta alianza tiene como objetivos principales, entre otros, garantizar los derechos humanos y los estándares sociales en la obtención de materias primas, así como idear soluciones para la reutilización de las baterías de iones de litio.
Optimización del uso del agua
El principio de la economía circular también es un aspecto decisivo en el campo de la producción. Y este principio afecta, entre otros aspectos, al uso del agua. La planta de San José Chiapa en México muestra cómo podría ser el futuro de las plantas de Audi en este aspecto puesto que ya se ha conseguido que esta instalación lleve a cabo su producción sin generar ningún tipo de aguas residuales: todo el agua que se utiliza se trata y se depura que se pueda reutilizar de nuevo en la planta.

Descarbonización de las cadenas de suministro
También en el ámbito de las cadenas de suministro se piensa en el futuro. Por eso, apostamos por la comunicación eficiente con proveedores, abastecedores y socios. En el marco del "programa de CO2", iniciado en 2018, trabajamos juntos en medidas comunes para la reducción de emisiones. En este programa se pone el foco en la producción de materiales con un consumo de energía especialmente elevado, como aluminio, acero y componentes de baterías. En sus correspondientes talleres se han adoptado ya medidas que, todas juntas, suponen en la cadena de suministro un potencial de ahorro de 1,2 toneladas de CO2 para toda la flota de vehículos. En el futuro se espera que la aplicación de las medidas adoptadas sea un elemento fijo en la negociación de nuevos contratos de suministro. Por ejemplo, el uso de electricidad verde es desde 2018 una de estas condiciones en los contratos de proveedor con fabricantes de células de batería de alto voltaje.
También se incluye en los acuerdos con los abastecedores el bucle cerrado de aluminio. Un concepto que pone el foco en la generación de un circuito eficiente en lo referente al mecanizado de las chapas de aluminio en la fábrica: los recortes de chapa de aluminio que quedan como restos en la planta de prensado vuelven directamente a los proveedores, que los procesan y vuelven a mecanizarlos. A continuación, Audi vuelve a utilizar en su producción las chapas de aluminio obtenidas de este modo. Desde la implantación de este sistema en Neckarsulm e Ingolstadt, Audi ha ahorrado en torno a unas 350.000 toneladas de CO2 en su balance1. En el futuro, el bucle cerrado de aluminio también se implantará en más centros de producción.
Certificado de sostenibilidad
El aluminio se utiliza, por ejemplo, en la carcasa de las baterías de los modelos Audi e-tron. Audi ha obtenido el certificado de sostenibilidad de la Aluminium Stewardship Initiative (ASI) por su producción sostenible de carcasas de batería (fuente: aluminium-stewardship.org).
Puedes ver solo tecnología, o ver cómo se construye el mañana.

Audi e-tron Sportback: Consumo de electricidad combinado*: 25,9–21,2 kWh/100 km. Emisiones combinadas de CO₂*: 0 g/km
Audi e-tron Sportback: Consumo de electricidad combinado*: 25,9–21,2 kWh/100 km. Emisiones combinadas de CO₂*: 0 g/km